Cómo Psicólogo me he encontrado con personas que me dicen que son infelices como profesionales, y después de conversar con ellas en la mayoría de los casos encuentro que están haciendo algo a nivel laboral o profesional que realmente no era con lo que ellos soñaron, infelicidad que en la mayoría de los casos se ve relacionada con sus resultados económicos.
En muchos casos esta situación tiene una buena disculpa que es entendible y es que económicamente no había como hacer los estudios correspondientes a sus sueños. Sin embargo hay un caso que es lamentable en el cual me quiero centrar hoy, y es el que algunos se encontraron con una persona quien se encargó de manipular este sueño y llevarlos hacia otra parte donde ellos no querían.
A estas personas un autor (no recuerdo su nombre) las llamo “Ladrón de Sueños” ya que se han llevado las ilusiones, los sueños y con ellos la vida de muchas personas quienes pudieron ser grandes y exitosos en lo que soñaban, pero que acabaron haciendo algo diferente por darle gusto a quien les dijo alguna vez que cambiaran de idea y estudiaran o hicieran otra cosa.
Entre estas personas que se han llevado sueños (por no decir “Ladrones de Sueños” que me parece que es un poco fuerte) a veces encontramos por ejemplo algunos padres que han desempeñado una profesión con éxito porque son verdaderos apasionados por ésta, y quieren que sus hijos hagan lo mismo creyendo que sentirán la misma pasión con la que ellos la desarrollaron.
Otros tratan de cambiar el rumbo de sus hijos bajo algunas creencias acerca de una profesión o trabajo en particular, y otros bajo algunos intereses creados como es el que maneje la empresa familiar o gane el suficiente dinero para sacar adelante a sus padres, o incluso porque le importa más el qué dirán los demás de que esta persona estudie tal o cual cosa.
Sin embargo en estas decisiones también influyen los hermanos, tíos o amigos que erróneamente se involucran en las decisiones de vida y futuro de una persona que podría llegar a ser feliz con sus propias decisiones, o infeliz solo por llevarle la razón en algún momento a alguno de estos personajes que enmascarados con el antifaz del amor les dijeron que era lo “mejor” para sus vidas. Pregunto, ¿Quién sabe qué es lo mejor para uno?
Y les digo enmascarados porque estas personas estoy seguro que no lo hacen para mal, ninguno dice “le voy a dañar la vida a este niño y le voy a recomendar que estudie tal o cual cosa para que le vaya mal en la vida”, eso no es así, con seguridad siempre lo hacen porque le tienen amor a quien tratan de “orientar”, sin embargo el verdadero amor permite el libre albedrío, el verdadero amor permite ser feliz con las decisiones que cada uno quiera tomar, el verdadero amor no tiene apego, al fin y al cabo es la vida de otro y el “Ladrón de Sueños” no le va a poner el pan sobre la mesa más adelante si con las decisiones que le dijo que tomara se equivocó.
Esto puede parecer un poco fuerte pero es que con la felicidad de las personas no se juega, es tan sencillo como que con una decisión de estas una persona puede llegar a ser feliz o infeliz TODA SU VIDA.
La mayoría de personas que me han manifestado esta infelicidad escucharon algunas frases como: “No estudies esto que eso no es una profesión digna”, o “No trabajes allí que ese no es un trabajo digno”, o “Estudia una profesión de verdad”. Estos no son más que comentarios basados en juicios personales de quien los emite y nunca en la realidad.
Cuando una persona hace juicios como los anteriores en ningún momento tiene un argumento basado en la felicidad, su argumento es netamente racional y material, es decir, a esta persona no le interesa sino el dinero y no la felicidad que la persona pueda experimentar al hacer o estudiar aquello con lo que sueña.
Hace un tiempo alguien me pregunto ¿Qué quiere ser tu hijo cuando grande? y le conteste: futbolista, le conté que el entrenaba en las divisiones menores del equipo profesional de la ciudad y que soñaba con ser un jugador profesional. Esta persona me escucho y me pregunto ¿en qué año está tu hijo en el colegio? y le dije en noveno grado (4Bto), y me contesto, ¡no te preocupes que para cuando salga del colegio eso ya se le ha quitado!… Jajaja, hoy me río pero en ese momento me molesto, lo expresó como si lo que mi hijo tuviera fuera una enfermedad con la que no estaba de acuerdo pero con la que yo debía estar tranquilo y esperanzado que iba a desaparecer.
A este necio comentario le conteste “es que yo no quiero que se le quite, ese es su sueño y por lo tanto también es el mío al querer que sea feliz, y se lo voy a patrocinar con todo lo que yo pueda para que en lo posible se le haga realidad”. Esta persona quedo sorprendida pero en silencio. Quizás es de aquellas que piensa que esta “no es una profesión digna” y le importa más el que dirán.
Está bien que yo deba hacerle énfasis a mi hijo en sus estudios y que siempre debe tener un Plan B por si su Plan A (el fútbol) no se hace realidad por X o Y razón, pero en ningún momento me meteré en sus decisiones de que es lo que él desea que lo haga feliz el resto de su vida, ya que como padre lo único que debo hacer es ayudarlo a ser feliz en aquello que el decidió seria su futuro, pues como padres considero que somos unos orientadores y unos guías de su camino y no unos generadores de obstáculos, por lo que debemos brindarles todo nuestro apoyo en aquello que ellos consideren los va a hacer felices.
Ahora, como vamos a hablar de una profesión digna cuando la verdadera dignidad es ser feliz. Cuando el verdadero significado de la dignidad está relacionado con la libertad y poder creador que tenemos los seres humanos de poder proyectar nuestras vidas mediante la toma de nuestras propias decisiones basadas en nuestro libre albedrío y derecho personal.
Bien define Wikipedia lo que significa la dignidad y que me gustaría que leyeras en detalle:
“La Dignidad se explica en buena medida por la «autonomía» propia del ser humano, pues sólo el que sabe y puede gobernarse a sí mismo, según un principio racional resulta «Señor de sus Acciones» y en consecuencia, al menos parcialmente, un sujeto libre; al regular su comportamiento según normas propias, según el significado etimológico de la voz griega ‘auto-nomía’, ya no es un mero súbdito, ya no está bajo el dictado de otro, sino que es un ciudadano. Entendemos que esa autonomía o dignidad es solo un «potencial de emancipación» respecto a las necesidades e imposiciones naturales o sociales en la historia universal del género humano. La dignidad humana es un valor o (derecho) inviolable de la persona”. (los subrayados son míos).
Entonces la dignidad humana es autonomía, es la posibilidad de diseñar un proyecto de vida que me permita vivir como quiera basado en mi derecho a la libertad de elección, teniendo en cuenta que en esta elección puede estar mi felicidad.
Así que SIEMPRE será un “Trabajo Digno” o una “Profesión Digna” aquella que elijas desde el corazón, bajo el ejercicio de tu libertad y bajo el concepto claro de que la diferencia entre Vocación y Trabajo está en que la vocación la disfrutas y te hace feliz y el trabajo no. Y basado en este principio y a través de ver cientos de entrenamientos de mi hijo y del equipo profesional de fútbol de mi cuidad, me doy cuenta que los jugadores de fútbol no trabajan, los jugadores de fútbol se divierten y por eso les pagan, eso es Vocación. ¿Cómo no voy a patrocinar a mi hijo si es allí a donde todos desde las diferentes profesiones o trabajos que tengamos debemos llegar?
Y para ti niño, adolescente o cualquier adulto que siga teniendo despierto su niño interior y tenga un sueño, siempre que elijas una proyección de futuro elige con el corazón, elije todo aquello que te haga crecer como persona y como espíritu, elije aquello que te haga sentir en tu pecho las vibraciones de la felicidad, y en ese momento sin duda estarás escogiendo una vocación que te llevará directo al éxito.
A ti padre de familia, patrocina desde niño a tus hijos en aquello que quieran realizar, nunca le digas “deje de soñar”, no importa que parezca una locura, en esas aparentes locuras puede estarse formando el triunfador del futuro, bien porque logró ser lo que quería de niño, o bien porque en esos momentos de ensoñación estaba fomentando estados de felicidad y conociendo lo que se sentiría ser alguien grande y atrayendolo a futuro a su vida.
Por tal motivo si tu hijo desea ser Astronauta, hazle creer que si lo puede ser, aprovecha y dile que debe ponerle mucha atención a las matemáticas en el colegio porque los astronautas son buenos matemáticos, (quizás no sea astronauta pero si un gran administrador, contador o economista), si quiere ser Chef Gourmet no veas solo un Chef, mira en tu mente como ese Chef puede convertirse en empresario dueño de una cadena de restaurantes a nivel mundial, y además con restaurantes con un concepto de construcción único porque además le encanta jugar armando Lego y tiene mucha creatividad, y así con cada una de las aparentes “locuras” que se le puedan ocurrir a un niño.
¿Te has preguntado, porque no hay Abundancia y Prosperidad en la mayoría de personas? Una de las respuestas podría estar en lo que acabamos de hablar.
Para terminar recuerda estos tres principios:
- De lo que eres digno es de ser feliz y de hacer felices a otros.
- Son muchas las personas que no son felices porque algún día alguien les dijo que dejaran de soñar. Atrévete a soñar y lucha por tus sueños.
- Una profesión o un trabajo de “verdad” es aquel que DE VERDAD te puede hacer FELIZ porque te sale del corazón y por lo tanto será una vocación.
Te deseo que seas feliz soñando y dejando soñar.
¿Como te Pareció este Artículo? Déjame tu opinión en comentarios…
Articulo Anterior: Los Valores y la Ética están Mandados a Recoger?
Andrés Rada Restrepo
Psicólogo – Neuropsicólogo
Máster en Programación Neurolingüística (PNL)
Motivador y Conferencista
Visítame en: www.AbreTuMenteAlDinero.com
Facebook: www.facebook.com/AndresRada
Cada uno de estos Artículos tiene Derechos Reservados de Autor, se permite copiarlos y colocarlos en la Web o un libro siempre y cuando tenga la fuente y sea respetado el nombre del autor que en este caso es: Andrés Rada.
Compárte el Artículo en Facebook y Twitter:
Uufff, excelente articulo, me has dejado pensando, quizas me he equivocado algunas veces al respecto, lo peor es que quizas estoy repitiendo lo que me hicieron a mi…. Gracias, voy a pensarlo bien.
Muy bueno el articulo, yo en realidad nunca me metí en lo que querían estudiar mis hijos siempre les dije que si ellos iban a ser mas felices que decidieran ellos. Mis padres tenían un negocio y mis hermanos querían seguirle, mis padres les dijeron que si iban a ser mas felices que lo siguieran, y hasta ahora están trabajando en lo que los gustaba aunque dejaron la carrera a medias. Creo lo mismo que tu, que nunca debemos hacerlos cambiar de opinión, debemos de dejarlos hacer lo que quieran ser Porque siendo felices van a conseguir mas cosas. Bendiciones
PASA SIEMPRE O CASI SIEMPRE. UNA VEZ MAS EXCELENTE LO Q PRESENTAS, TODOS SIN EXCEPCION DEBERIAN LEERLO.
Gracias por recordarme que lo importante es que seamos felices y consigamos nuestros sueños.Tengo un hijo de 12 años y le digo que piense lo que quiere hacer en su vida que le haga disfrutar y el tiempo se le pase rápido.
Siempre leo lo q públicas , y me parecen muy acertados todos los temas , q manejas, gracias por compartirlo con todos nosotros , saludos.
Me pareció excelente mencionabas en uno de tus cursos enviar amor a lo que deseas pero reflexione que tipo de fuente lleva lo que anhelo en la realidad en mi profesión y saque como conclusión que nunca es tarde para comenzar de nuevo para ser feliz para realizar un sueño de niño en cuerpo de adulto gracias Andrés.
HOLA SOY LOLI Y ME PARECE ESTUPENDO LO QUE HAS ESCRITO PUES TE COMENTO QUE YO HE VIVIDO Y TODAVIA LO VIVO, Y ES HACER LO QUE LOS DEMAS DESEAN Y MIS COSAS NI LAS ESCUCHAN, DICEN QUE SON TONTERIAS Y JAMAS HAGO LO QUE DE VERDAD DESEO, SI NO LO QUE LOS DEMAS QUIEREN. ME A GUSTADO MUCHO Y TIENES TODA LA RAZON SOLO HAY INFELICIDAD. BESOS
La cosa más sencilla del mundo es convertirse en ladrón en nombre del amor, caeiño, «comprensión»: solo hay que disuadir a alguien de que luche por su sueño. Muy bueno tu artículo; ¡mucho con eso! recuerda que cada vez que ayudas a alguien estás sembrando una recompensa y en esto de la siembra, el fruto es ¡muuuucho por uno! Dios no es pichicato.
Es una reflexion muy profunda especialmente para padres de familia, a mi personalmente me hizo reflexiónar que debo patrocinar y ayudar a mis hijos en lo que le hacen felices
gracias ANDRES